La Historia de la Fender Stratocaster Blackie de Eric Clapton
Jun 21, 2023
Eric Clapton, el legendario maestro de la guitarra cuyo talento, se encontraba durante los años 70 en una etapa de transición musical, explorando diferentes estilos y experimentando con nuevas técnicas. Fue en ese momento que adquirió una Fender Stratocaster de 1956 en una tienda de segunda mano.
Sin embargo, esta guitarra se encontraba en un estado deteriorado debido a los años de desgaste. Esto llevó a Clapton a emprender un proyecto único y personalizado. En busca de la guitarra perfecta, Clapton compró tres Fender Stratocaster: una de 1956, otra de 1957 y una tercera de 1958. Cada una de estas guitarras tenía características únicas que Clapton quería fusionar en un solo instrumento.

Con la ayuda de su amigo George Gruhn y otros luthiers, comenzó el proceso de construcción. Desmontando las tres guitarras, Clapton seleccionó cuidadosamente las mejores partes de cada una. Utilizó el cuerpo de la Stratocaster de 1956 por su tono y resonancia distintivos, el mástil de arce de la de 1957 por su comodidad y sensación en la mano, y el diapasón de la de 1958. Estos elementos cuidadosamente elegidos dieron forma a la guitarra apodada como Blackie.
El nombre "Blackie" surgió cuando Clapton decidió pintar el cuerpo de la guitarra de negro y eliminar la capa de pintura original, creando un aspecto desgastado y distintivo. Este instrumento personalizado se convirtió en una extensión de Clapton y lo acompañó en muchas de sus grabaciones y actuaciones más memorables. En 2004, Clapton tomó la decisión de subastar la Blackie por una causa benéfica; recaudando más de un millón de dólares en la subasta. La historia de la Fender Stratocaster Blackie de Eric Clapton es un testimonio del poder que una guitarra personalizada puede tener en la vida de un músico. Su búsqueda de la perfección y su dedicación a crear un instrumento único son un ejemplo inspirador para los amantes de la música y los guitarristas de todo el mundo.